150 palabras I Sofá, Castillo, Luz

Clara estaba echada en el sofá, apática, soñando con países lejanos, llenos de castillos abrumadores que esconden apasionantes laberintos y curiosísimos jeroglíficos por descifrar...

La gustaba trasladarse allí constantemente, recorre los largos pasillos de los oscuros castillos una y otra y otra vez, conocer fantasmas de lo más divertidos, disfrazarse con largos vestidos de otras épocas, hacer conjuros y cocinar pócimas secretas, encontrar una barita mágica y utilizarla para llenar todo el castillo de chuches, poner en marcha viejas máquinas que la lleven a tiempos pasados y futuros... pero esta vez, la aventura quedará a medias; de repente, la luz de la ventana entra a modo de despertador y saca a Clara de su apatía, remolonea, se estira y poco a poco sale de su letargo, mira el reloj, es hora de volver al mundo real, toca ir a clase... ¡¡ Y llega tarde !!